Sandplay, el juego de arena Junguiano

Lo invisible se hace visible

Cuando entras en el despacho donde el psicólogo (o la psicóloga) analista tiene el espacio del Juego de Arena, no puedes evitar quedarte boquiabierto por unos instantes: ves una gran pared con estantes de arriba abajo, repletos de figuritas variopintas, algunas bastante curiosas, representando todo aquello que conoces del mundo (o casi). Y, delante de la impresionante muestra de figuritas, dos contenedores azules que descansan sobre dos mesitas de madera con ruedas, una con arena húmeda y la otra seca.

Y, a continuación, cuando sales de la sorpresa inicial, la psicóloga (o el psicólogo) analista te dice: elige una de las dos. Tú realizas la elección, y ella retira la otra que descartaste, y continúa: ahora, en este espacio que has elegido, eres LIBRE de hacer lo que quieras, con la arena y con todo lo que tienes a tu alrededor.

¿Cómo dices?, exclamas. Puedes tocar la arena, sentirla, moverla, darle forma, coger figuritas y colocarlas dentro de este espacio… haz una composición… lo que te surja, no hace falta que pienses, déjate fluir.

Primero con un poco de extrañeza, después te vas animando, acabas haciendo algo… algo que cuando has terminado te deja con una sensación por dentro: alivio, relajación, revolución interior… o quizás no notas nada más que agrado.

Después, el analista te dice que le expliques un poquito qué has hecho, qué has representado en tu espacio… o que le cuentes una historia, si eres hablador o imaginativo.

Y es aquí cuando, si antes no apreciabas ninguna sensación interna, te das cuenta… de una situación que no querías encarar, o que habías “olvidado”, o de qué es a lo que debes prestar atención en este momento para no bloquearte más, o de cosas buenas que salen de ti y no te valorabas… y más…

Esta experiencia será la primera de un proceso terapéutico profundo, donde el inconsciente se hace visible (y en tres dimensiones).

Los más curiosos os preguntaréis: en pocas palabras, ¿qué está pasando? Al introducir las manos en la arena y dejar libre la imaginación, se movilizan las energías creativas del inconsciente iniciándose un proceso psíquico que conduce a la salud y al desarrollo de la personalidad        .

El Juego de Arena (Sandplay) es un proceso terapéutico de base no verbal desarrollado por Dora Kalff, Analista Junguiana y discípula de Carl Gustav Jung.

Se aplica tanto a adultos como a niños, alternándolo con la terapia verbal o bien empleándolo de forma exclusiva, muy indicado para los que se “estancaron” en una psicoterapia verbal, y especialmente útil en personas bloqueadas mental, emocional o sexualmente.

Como es un método no invasivo, es el más indicado para aquellos niños y adultos que han sufrido abusos y diversos tipos de violencia, enfermedades, traumas intensos, o desastres naturales. Un ejemplo actual: tras el terrible tsunami en Japón, los servicios psicológicos de catástrofes no dieron resultados positivos, por lo que se aplicó terapia de Sandplay a la población gravemente afectada, pues era el único abordaje terapéutico efectivo al ser suave y no invasivo.

Y, por supuesto, es ideal para el que quiere conocerse a sí mismo y desarrollarse como persona.

Como veis, el Sandplay es una terapia innovadora (quizás heredera de las visiones de los chamanes, de los dibujos con arena coloreada de los indios Navajo y de los monjes tibetanos, del jardín zen…) con aplicaciones ilimitadas, apenas conocida en España.

Juan Carlos Albaladejo y Esperanza Pérez
Psicólogos Clínicos – Analistas Junguianos